Un roble profesor
Un roble profesor. Jesús H. González de León.
José Rodríguez González estaría llamado a llevar a cabo cosas grandes para su patria. Nació en 1880 en el desértico municipio de Ocampo Coahuila. Fue un apasionado de la tierra en su niñez y en su juventud. Eso lo heredó de su padre Nicolás Rodríguez quien obtuvo sus recursos del cultivo de la tierra y de la cría de ganado. Nicolás actuó con honradez y franqueza, siendo el primer juez local del pueblo. José Rodríguez heredó también esas cualidades de su padre. Supo elevarse desde ayudante de una escuela primaria, pasando por todos los puestos de la escalera magisterial, como el de director de la Escuela Normal, de la Anexa, y del Colegio Roberts, hasta llegar a Director General de Educación en el Estado. Le dio a su acción docente una fuerza y una energía moral tan profunda , que convirtió a su cátedra en forja de caracteres y en espejo de honradez ciudadana, lográndose ganar el afecto de sus alumnos y demás maestros. A Rodríguez González le decían el roble de Ocampo por su fuerte constitución física, moral y cívica. El roble supo crecer desde la tierra hostil del desierto. Instituyó el saludo a la bandera en todas las escuelas, creó el primer Jardín de niños en Coahuila, -en el cual estudió su servidor- y que hoy todavía lleva el nombre de “ Luis A Bouregard”. Su carrera no termino ahí : magisterio y política han ido históricamente de la mano. Aunque nunca dejo de ser profesor incursionó en puestos públicos.
La rectitud del roble se manifestaba en su actuar: Cuando asistió representando a Coahuila al Congreso Constituyente de 1916 a 1917, época en que defendió en el articulo tercero Constitucional la obligatoriedad de la escuela primaria. Después de 1917 a 1919 fue diputado en el congreso local y durante ese periodo renuncio a su sueldo que como maestro tenia, sin desatender ni un momento sus actividades docentes. Fue Presidente Municipal de su ciudad natal en 1921 y luego como Sindico primero del Ayuntamiento de Saltillo en 1929 “su labor fue siempre ecuánime y benéfica, como en otras ocasiones aprovechó su posición , no para aumentar su patrimonio sino para cultivar nuevas relaciones y favoreces los intereses del pueblo.”
En 1926 publicó la primera geografía de Coahuila, obra reconocida. “Un maestro en contacto con el pueblo, que siente y vive sus logros e ideales, tiene un lugar en la lucha para sostener las banderas de la justicia y de la dignidad. Como Rodríguez González los maestros de ahora deben de conducir a la juventud con un ejemplo de bondad, voluntad firme, caballerosidad energía, entusiasmo y patriotismo.
El roble tuvo larga vida, murió a los 94 años, dejando frutos en obras y en descendencia. A varios de mis maestros admiro, les doy las gracias porque les debo en gran parte lo que soy. Entre ellos, mi bisabuelo Rodríguez González es para mi un modelo a seguir, difícil de superar. A través de este tributo a su memoria, rindo homenaje a todos los maestros que día con día forjan las almas. Felicidades en su día. jesus50@hotmail.com
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